La incontinencia urinaria es uno de los síntomas del Alzheimer en sus etapas avanzadas.
La pérdida de control de la vejiga en las personas con esta enfermedad se debe a diversos factores, entre los que podemos enumerar su incapacidad para reconocer los impulsos naturales, olvidar dónde se encuentra el baño o los efectos secundarios de algunos medicamentos.
¿Cuáles son los primeros síntomas del Alzheimer?
Aunque la incontinencia urinaria es habitual en muchas personas con demencia y Alzheimer, este síntoma no suele aparecer al principio de la enfermedad, siendo sus primeras manifestaciones más evidentes los cambios asociados al estado de ánimo, el control emocional, el comportamiento o la motivación.
La Alzheimer’s Association ha elaborado una lista de "señales de advertencia" que pueden ser claves para el diagnóstico precoz del Alzheimer y entre las que podemos enumerar:
- Desorientación espacio-temporal. Asociada a la pérdida de la conciencia sobre el paso del tiempo, las fechas, los días, etc.
- Falta de memoria "cotidiana". Se trata de una de las primeras "señales" del Alzheimer y no debemos confundirla con los olvidos puntuales que pueden atender a un exceso de estrés o a una falta de atención. Cuando se asocia al Alzheimer, los olvidos son repetidos y persistentes.
- Dificultades para hacer tareas y resolver problemas cotidianos. Por ejemplo, no saber volver del supermercado a casa o llegar al domicilio de un familiar, tener problemas para organizar las cuentas del mes o perderse al seguir las instrucciones de una receta ya conocida.
- Problemas en la visión. Las dificultades para leer, determinar distancias espaciales o identificar colores o contrastes son síntomas de Alzheimer, aunque pueden confundirse con la edad avanzada o con problemas como las cataratas.
- Dificultades del habla. A las personas que empiezan a manifestar los primeros síntomas del Alzheimer puede resultarles complicado seguir una conversación, terminar frases o encontrar el vocabulario apropiado y llamar a las cosas por su nombre.
- Problemas para encontrar cosas. En las primeras etapas del Alzheimer, algunas personas creen que les hurtan o esconden sus pertenencias porque no son capaces de encontrarlas. En realidad, lo que suele ocurrir es que olvidan dónde las han guardado o las han colocado en lugares distintos a los habituales.
- Problemas para tomar decisiones. Los cambios de opinión o de juicio y las decisiones extrañas también pueden percibirse como un signo del Alzheimer.
- Cambios de humor. Los enfados repentinos e injustificados, el miedo o la ansiedad pueden ser síntomas de Alzheimer. Aparecen en las primeras fases de la enfermedad y se agudizan con el tiempo.
- Problemas en el aseo personal. Muchas personas con Alzheimer olvidan o descuidan su imagen y su higiene.
¿En qué momento aparece la incontinencia urinaria como un síntoma del Alzheimer?
La pérdida del control de la vejiga o el intestino (incontinencia) suele aparecer cuando el Alzheimer se encuentra en su fase moderada o avanzada.
La fase moderada constituye el periodo más prolongado de esta enfermedad y puede durar muchos años, a lo largo de los cuales la persona requerirá un mayor nivel de atención.
En esta etapa, es habitual que las personas afectadas tengan problemas para controlar la vejiga, no sientan la necesidad de miccionar o no recuerden donde está el baño.
En la etapa más avanzada, las personas pierden la capacidad de responder a su entorno e incluso de controlar sus movimientos, lo que se traduce en pérdida de capacidades físicas para hablar, sentarse, orinar e incluso tragar.
Si tomamos como referencia la Escala Global del Deterioro (GDS), la más utilizada por profesionales y cuidadores, la incontinencia aparece en la etapa 6 (Demencia moderadamente severa o Declive cognitivo severo).
De hecho, cuando esta etapa llega a su fin, el paciente es doblemente incontinente, necesita ayuda para vestirse y bañarse y tiene problemas severos para comunicarse.
Cómo controlar la incontinencia urinaria
Evitar las bebidas que pueden aumentar la micción (café, té y bebidas con gas y cafeína) o mantener los caminos despejados y el baño ordenado, con una luz encendida en todo momento, son claves para facilitar el día a día de las personas con Alzheimer.
También conviene que sus cuidadores les recuerden la necesidad de hacer descansos regulares para ir al baño o suministrarles ropa interior fácil de poner y quitar, así como usar fundas y protectores para sábanas, pañales especiales y orinales/WC portátiles en el hogar.
Si deseas profundizar más sobre cómo gestionar la incontinencia en personas mayores, echa un vistazo a este artículo.
El Alzheimer en cifras
El Alzheimer es una de grandes "epidemias" del siglo XXI: aunque cada día se diagnostican miles de nuevos casos y se realizan numerosos estudios sobre su origen, se trata de una enfermedad que sigue siendo desconocida, con efectos devastadores en quien las sufre y su entorno, y para la que, hasta la fecha, no hay cura.
El Alzheimer es la causa más común de demencia (representa entre el 60 y el 80% de los casos en personas mayores) y afecta a más de 55 millones de personas según la organización Alzheimer 's Disease International (ADI).
Según la ONU, es la séptima causa de defunción y una de las causas principales de discapacidad y dependencia entre las personas de edad avanzada en el mundo.
Esta misma organización internacional alerta de que la demencia afecta mucho más a las mujeres, tanto directa como indirectamente: ellas presentan índices más elevados de años de vida ajustados en función de la discapacidad y de mortalidad por esta causa, siendo también las responsables del 70% de las horas de cuidados de las personas que viven con esta enfermedad.
Cuidar de una persona con Alzheimer implica aprender a convivir con algunos de sus síntomas, como la incontinencia urinaria. Cada mes, desde Club de Cuidadores, lanzamos una newsletter con la última información más interesante para cuidadores, suscríbete aquí.