Los problemas de próstata son muy comunes en la edad adulta.
Y es que, esta glándula, que en la juventud tiene el tamaño de una nuez, tiende a agrandarse con los años, provocando dificultades para orinar, incontinencia o urgencia miccional que pueden indicar infecciones, hiperplasia benigna de próstata (HBP) o cáncer.
¿Hay alguna relación entre problemas de próstata e incontinencia?
La próstata es una glándula del sistema urinario y reproductor masculino.
Se encuentra en el área de la pelvis, debajo del abdomen, junto a la vejiga urinaria, rodeando la primera porción de la uretra.
Su principal función es producir líquido prostático, que forma parte del semen junto con el líquido de las vesículas seminales y los espermatozoides.
Además, sus músculos ayudan a expulsar el semen durante la eyaculación.
La próstata también controla el flujo de orina a través de la contracción muscular alrededor de la uretra, que transporta la orina desde la vejiga hasta el pene.
Esto quiere decir que los problemas en la próstata pueden disminuir o interrumpir el flujo de orina, siendo una de las principales causas de incontinencia urinaria en varones.
¿Qué es el "síndrome prostático"?
Los hombres pueden verse afectados por tres tipos de problemas de próstata:
- Prostatitis.
- HBP.
- Cáncer.
La prostatitis es una infección y suele afectar a hombres más jóvenes, mientras que la HPB y el cáncer son más comunes en adultos y ancianos.
La mayoría de los problemas urinarios en el varón adulto están asociados con la hiperplasia prostática benigna, un proceso correlacionado con la edad (afecta al 75% de los hombres mayores de 80 años) y cuya sintomatología se conoce de forma genérica como "síndrome prostático".
Problemas de próstata asociados al síndrome prostático.
La hiperplasia benigna de próstata es un agrandamiento de la próstata que puede provocar una obstrucción a nivel de la uretra, es decir, en el conducto de la orina.
Este es uno de los principales motivos por los que las personas que sufren HBP tienen dificultad para eliminar la orina: el chorro de la orina es cada vez más fino y menos potente, lo que provoca que la micción deba realizarse en "varios tiempos".
Por este mismo motivo, las personas con la próstata agrandada experimentan una sensación de vaciado incompleto al orinar y suelen aumentar el número de micciones, tanto diurnas como nocturnas.
Cómo detectar problemas en la próstata: tips pueden poner alerta a los cuidadores
Los cuidadores somos un actor fundamental para detectar cambios en la salud de las personas que están a nuestro cargo.
En el caso de los problemas de próstata, debemos ponernos alerta si la persona que cuidamos...
- Se despierta muchas veces a orinar por las noches.
- Tiene problemas para iniciar la micción.
- No puede controlar el flujo de orina.
- Experimenta pérdidas de orina o un goteo terminal al hacer pis (esto puedes notarlo al cambiar la ropa interior).
- Presenta urgencia miccional.
- Acude mucho al baño porque tiene la sensación constante de no haber vaciado bien la vejiga.
- Manifiesta molestias al orinar.
- Tiene restos de sangre en la orina.
¿Quién tiene más probabilidades de tener problemas de próstata? Factores de riesgo y diagnóstico
Cualquier varón puede tener problemas de próstata a lo largo de su vida, aunque son más comunes en la edad adulta y, sobre todo, en la vejez.
La prostatitis no tienen factores de riesgo específicos, y puede relacionarse con infecciones en la vejiga y la uretra, daños en los nervios del tracto urinario inferior por una cirugía o una lesión y estrés emocional.
En el caso de la hiperplasia benigna, el factor de riesgo predominante es la edad, siendo más común en varones mayores con antecedentes familiares y/o afecciones de salud, como obesidad, diabetes tipo 2, enfermedades cardiacas, problemas respiratorios o sedentarismo.
Para diagnosticar problemas en la próstata, se realiza un estudio de la historia clínica del paciente, junto con una exploración física que incluye un tacto rectal.
Otras prueba diagnósticas son la ecografía (para determinar el tamaño de la próstata y comprobar el volumen de orina que se mantiene en la vejiga después de realizar una micción), la micciometría y algunas pruebas urodinámicas para comprobar la capacidad de retener y expulsar orina y valorar el grado de obstrucción en la vía urinaria.
También suele realizarse una analítica de sangre general, una analítica de sangre específica para determinar el antígeno prostático específico (PSA) y, en algunos casos, una biopsia para diagnosticar o descartar cáncer.
Respecto al tratamiento de los problemas de la próstata, depende de su origen:
- La prostatitis puede tratarse con antibióticos y medicamentos antiinflamatorios.
- El agrandamiento benigno de la próstata puede tratarse con bloqueadores α1, que relajan los músculos alrededor de la uretra, y con inhibidores de la 5α-reductasa. Cuando el tratamiento farmacológico no es eficaz o la repercusión clínica es importante, se valora el tratamiento quirúrgico.
- El tratamiento del cáncer de próstata depende de la naturaleza del mismo y de la elección del paciente, pudiendo usarse o combinarse quimioterapia, radioterapia, braquiterapia de próstata, terapia hormonal o cirugía para extirpar parte o la totalidad de la próstata (prostatectomía).
Los problemas de próstata condicionan la calidad de vida de los varones que los sufren, de ahí la importancia de su identificación para ofrecerles los mejores cuidados y encontrar las mejores soluciones para la incontinencia urinaria en hombres.
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