Incontinencia y obesidad
La incontinencia urinaria es la pérdida del control de la vejiga o la incapacidad de controlar la micción. Es una afección común. Puede variar desde un problema menor hasta algo que afecte en gran medida tu vida diaria. La incontinencia y la obesidad forman parte de las diversas causas de la aparición de este problema.
Para conocer las causas de la incontinencia urinaria es fundamental que acudamos al médico. Él nos despejará todas las dudas al realizarnos un examen exhaustivo. La IU puede ser causa de hábitos diarios, enfermedad o algún problema físico. Su evaluación no sólo nos ofrecerá una solución sino tranquilidad a la hora de afrontar estas pérdidas.
Cómo influye la obesidad en la incontinencia urinaria
La obesidad es uno de esos factores de riesgo de sufrir incontinencia urinaria en el que menos reparamos. La incontinencia y la obesidad es una combinación a evitar porque el sobrepeso puede contribuir a que aparezca este problema debido al aumento de la presión intraabdominal secundaria, la cual aumenta, a su vez, la presión vesical y la movilidad de la uretra.
Según un estudio de revisión, publicado en Journal of Urology, existe una clara relación entre la obesidad y la incontinencia urinaria. El incremento del Índice de Masa Corporal (IMC) está asociado con un aumento aproximadamente de un 20% a un 70% en el riesgo de incontinencia urinaria.
Por esta razón, es fundamental cuidar nuestra alimentación y por supuesto, complementarla con la práctica de alguna actividad física adaptada tanto a la persona como a su edad. Estos dos simples gestos evitarán que la IU aparezca.
Cambios en la dieta para evitar la obesidad y la incontinencia urinaria
Si tienes sobrepeso u obesidad y quieres prevenir la incontinencia urinaria, apuesta por una alimentación rica en vitaminas. La vitamina C está asociada a las frutas y a las verduras y ayuda a la disminución de la urgencia urinaria. Huye de los suplementos y come alimentos que contengan esta vitamina de manera natural.
Una deficiencia de vitamina D en nuestra dieta está asociada a un aumento de la micción. Nutramos nuestro cuerpo con vitamina D que está presente en el salmón, atún y sardinas. También la encontramos en el yogur y los huevos. El yogur, además de ser un alimento sabroso ayuda, junto a otros productos lácteos fermentados, a disminuir el riesgo de infección del tracto urinario. Bajemos de peso y a la vez, mejoremos la IU.
Los antioxidantes del cacao, uvas, cacahuetes, manzanas o de la canela, pueden ayudar a mantenernos en nuestro peso y evitar que la obesidad y la incontinencia urinaria se conviertan en un problema para nuestra salud. Los estudios demuestran que la pérdida de peso disminuye los síntomas de la IU.
Tómatelo con calma porque incluso con una pérdida de peso moderada, los beneficios son elevados. No sólo se reducen las pérdidas de orina en casi la mitad, sino que nuestro cuerpo agradecerá que eliminemos esos kilos de más. Siempre con precaución y bajo supervisión médica.
La importancia de la bebida en la incontinencia urinaria por obesidad
Beber en exceso puede ser perjudicial si tenemos problemas de incontinencia y obesidad. De hecho, es interesante llevar un control de lo que ingieres a lo largo del día. Si la IU forma parte de tu día a día disminuir la toma de líquidos en un 25% es aconsejable. Sin embargo, no se trata de beber menos para evitar la incontinencia urinaria, en ningún caso debemos beber menos de un litro de agua al día. Por otra parte, tampoco es positivo ingerir mucho más incluso sin tener sed.
Si queremos bajar de peso y que esto influya en la IU o la prevenga, debemos evitar las bebidas carbonatadas, reducir el consumo de cafeína y alcohol. Tanto el agua como los zumos naturales de frutas o verduras siempre serán más saludables para la salud en general, y para evitar en particular problemas de pérdida de orina.
La incontinencia urinaria no debe afectar a nuestra vida social
Si bien hemos hablado de que la obesidad o el sobrepeso son aliados de la aparición de la IU, además de recomendar adelgazar, es importante que tanto las personas afectadas como los cuidadores sepan que a día de hoy hay mucha más información para prevenir y mejorar la calidad de vida de las personas con incontinencia urinaria.
Acudir al médico sin pudor mejorará tanto la salud de quien padece IU, como la autoestima y evitará problemas de ansiedad o depresión. La incontinencia urinaria es una afección que se da en un gran número de hombres y mujeres que pueden llevar una vida normal.
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