La incontinencia urinaria es un problema que sufren tanto hombres como mujeres. Para llevar una vida más tranquila y normal, el uso de pañales contra la incontinencia es un hábito común. Hoy trataremos el tema relacionado con los pañales para adultos financiados por la seguridad social.

Los pañales para adultos están disponibles en diferentes tallas y en diferentes grados de absorción. De mayor a menor absorción se pueden clasificar en: pañales de día, pañales de noche y pañales de súper noche.

Sin embargo, a diferencia de los pañales que puede usar cualquier niño sin ninguna condición especial, los pañales para adultos están financiados por la seguridad social.

Un factor a tener en cuenta es que no están financiados para todo el mundo. Sólo sucede con las personas que puedan justificar la existencia de incontinencia urinaria como son los pacientes con movilidad reducida y las personas mayores. Este dato es muy importante para que pueda llevarse a cabo la prescripción de pañales para adulto.

Si la persona que cuidamos cumple los requisitos, te proporcionarán pañales con una pauta de máximo cuatro al día, de los cuales como máximo uno de ellos podrá ser un absorbente de tipo noche o súper noche para dormir. Esto es independientemente de la marca, o del tipo elástico o anatómico.

En casos excepcionales, se puede aumentar hasta un máximo de cinco al día, respetando las mismas condiciones para los de noche o súper noche.

La duda está en si son muchos o pocos. Este tema es complicado porque cada persona es un mundo. Por ejemplo, hay cuidadores que observan que, dependiendo del día, una persona dependiente puede necesitar una cantidad u otra. Incluso entra la posibilidad de que se rompan antes de utilizarlos mientras se preparan.

Es decir, para una persona que está en cama, un pañal clásico cuyos laterales son de pegar puede ser más sencillo de poner, mientras que, para otras personas más independientes, una braga pañal no sólo es cómoda, sino también mucho más complicada de romperse.

Financiados o no por la seguridad social, hay un tema delicado relacionado con los pañales para adultos y la incontinencia urinaria. Se trata del rechazo o la negación a aceptar que se necesita de su uso para hacer una vida normal. Está en nuestras manos tratar de que acepten que se trata de una práctica habitual entre una diversidad de mujeres y hombres con problemas de incontinencia urinaria.

No sólo son cómodos, sino que permiten llevar una vida independiente y de calidad. Vamos a ver algunos consejos para lograr que las palabras pañal para adultos sean aceptadas como una prenda más:

• Empatía: un tema muy personal y ajeno que se debe tratar con total comprensión. En ningún caso debemos obligar a emplearlo contra su voluntad, muéstrate comprensivo, así podrás ayudarle a encontrar la solución del problema.
• Delicadeza: evita el estrés al afectado si no encuentra un baño cerca y puede manchar la ropa. Restar importancia a estos hechos, que son muy comunes, ayudará a que no se sienta avergonzado o incómodo.
• Comodidad y practicidad: al momento del empleo del pañal, si tiene alguna pérdida no se sentirá manchado y podrá evitar acomplejarse ante los demás. Insistir en que se trata de una prenda que sirve para ayudar y llevar una vida de mayor calidad. Además, nadie se va a enterar de que los usa.
• Discreción: los pañales para adultos son de diferentes formas y tamaños. Son muy absorbentes y muy delgados, evitando ser muy notorios. Por lo que se sentirá muy cómodo y mejor aún, sin temor a que “se vea” o “lo noten”. Lo importante es ir cómodo y a la vez, con la tranquilidad y seguridad de que nadie sabe que lo lleva.

Cuando se produce un cambio en la rutina de una persona adulta, es natural que sienta rechazo. Llevar pañales, aunque sean de adulto no todos lo encajarán como un beneficio. Sólo el tiempo y la escucha activa nos ayudará a que acepte esa prenda como una aliada para obtener calidad de vida.

Si necesitas ayuda a la hora de poner el pañal para adulto, recuerda que debes girar a la persona muy suave y cuidadosamente hacia un lado y doblar el pañal de adulto hacia adentro para que el contenido quede en el interior. Debes mover a la persona hacia el otro lado, siempre sobre el pañal y doblarlo lo máximo posible, tirando suavemente hasta sacarlo. En decúbito lateral es más fácil también el aseo de la zona. Recuerda utilizar siempre toallitas húmedas para un mejor resultado.

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