Las fases de la demencia senil pueden variar en cada persona y están muy vinculadas a la enfermedad que la ocasiona (Alzheimer, Parkinson, Enfermedad de Huntington, degeneración frontotemporal, etc.).
En este artículo hablamos de las fases de la demencia senil y de los cuidados asociados a cada una de ellas, incluyendo los síntomas en los estadios más avanzados, como la incontinencia.
Cómo establecer las fases de la demencia senil: GDS, CDR y test FAST
Aunque comúnmente se habla de tres fases de demencia senil (leve, moderada y avanzada), los expertos utilizan diferentes escalas para establecer los estadios de progresión de este cuadro clínico:
- Escala de Deterioro Global (GDS).
- Clasificación de Demencia Clínica (CDR).
- Prueba de Evaluación Funcional (FAST).
En todos los casos, se observan unos síntomas iniciales más leves (confusión mental, desorientación, déficit de memoria, cambios en el estado de ánimo o primeros problemas de comunicación) y que, a menudo, pueden confundirse con el deterioro propio de la edad.
Después, aparecen el deterioro intelectual o las dificultades para realizar actividades instrumentales de la vida diaria, como cocinar o asearse, lo que implica un mayor riesgo de accidentes domésticos.
Los últimos estadios, que coinciden con la fase más avanzada de la demencia senil, se caracterizan por la incontinencia urinaria, la pérdida de movilidad y, en definitiva, una dependencia cada vez mayor.
¿Por qué es importante identificar las fases de demencia senil?
Aunque el deterioro cognitivo progresivo y asociado al envejecimiento es inevitable, el diagnóstico de la demencia senil cae como un "jarro de agua fría" en las familias de los afectados.
Además, no siempre es sencillo. De hecho, a menudo las pruebas diagnósticas son muy limitadas y llegar a esta conclusión no es fácil para los neurólogos.
Esto también dificulta tratar la enfermedad que la origina (por ejemplo, el Alzheimer) , algo básico, tanto para el abordaje diagnóstico y terapéutico de la demencia, como para establecer un plan de cuidados más detallado y personalizado.
Fases de la demencia senil en función del deterioro cognitivo
1. Ausencia de deterioro cognitivo
Sería una fase que podríamos denominar de “predemencia” y en la que el funcionamiento cognitivo es prácticamente normal, aunque se observan despistes o falta de atención.
2. Déficit de memoria asociado a la edad
Aunque la aparición de olvidos puntuales es una consecuencia "normal" del envejecimiento, las pérdidas de memoria continuadas pueden indicar un futuro deterioro que afecte a la cognición.
3. Deterioro cognitivo leve
En esta fase aparecen los primeros síntomas de deterioro cognitivo evidentes, más allá de aquellos propios de la edad. Las personas suelen manifestar dificultad para retener información, concentrarse u orientarse.
4. Demencia leve o temprana
Esta sería la primera de las fases de una demencia senil diagnosticada.
Suele ser una etapa larga, y quien la sufre manifiesta, poco a poco, cambios en su personalidad y estado de ánimo y deterioro en sus habilidades sociales.
Muchos afectados son conscientes de lo que les ocurre y niegan los síntomas como mecanismo de defensa, algo especialmente duro, tanto para ellos como para sus familiares y cuidadores.
5. Demencia moderada
En esta fase de la demencia aparecen los primeros síntomas de dependencia, siendo normal que las personas comiencen a necesitar ayuda para actividades cotidianas como comprar, administrar sus citas médicas y organizar su medicación, utilizar el dinero, llamar por teléfono, leer o escribir.
6. Demencia moderadamente severa
En esta fase de la demencia, suele ser necesario contar con ayuda de uno o varios cuidadores de manera permanente. Además del agravamiento de los problemas de memoria (que incluyen el no reconocimiento de personas cercanas) en este momento aparecen las alteraciones del sueño, la deambulación, las conductas obsesivas y repetitivas, la agitación, los delirios e incluso la agresividad.
7. Demencia severa o avanzada
Las personas con demencia en fase severa o avanzada suelen experimentar una pérdida generalizada de habilidades psicomotoras, incluyendo las que son necesarias para hablar, caminar, comer, orinar o defecar.
Hablamos de un grado de dependencia alto, con todo lo que eso implica a nivel de cuidados.
Qué síntomas deben reconocer los cuidadores en cada fase de la demencia senil
La complejidad de los síntomas de cada una de las fases de la demencia senil hace que los cuidados deban personalizarse al máximo.
A continuación establecemos un esquema muy básico, a modo de resumen.
Demencia senil fase leve
- Olvidar nombres de personas y hechos recientes
- Olvidar dónde están los objetos cotidianos
- Problemas para encontrar las palabras adecuadas en una conversación
Demencia senil fase moderada
- Dificultad para asociar fechas y hechos
- Olvido que hechos recientes
- Frustración y desánimo
- Lenguaje confuso
- Cambios de humor
- Dificultad para interactuar con otras personas
- Problemas de orientación en entornos cotidianos
Demencia senil fase avanzada
- Incontinencia urinaria
- Incapacidad para mantener una conversación
- Deterioro de la motricidad e inmovilidad
- Problemas de deglución
- Debilitamiento del sistema respiratorio
- Aparición más frecuente de neumonías e infecciones causadas por las úlceras de presión
La formación en el cuidado de ancianos con incontinencia es muy importante.
Suscríbete a nuestra newsletter y recibe periódicamente información y recursos para ti.