Explicar a las personas mayores que ya no pueden vivir solas no siempre es sencillo.
Asumir las limitaciones propias, junto con el miedo a la pérdida de independencia o la reticencia a confiar en un desconocido, son algunos escollos que hay que superar para convencer a un anciano de la necesidad de contratar un cuidador.
Esta nueva situación puede ser muy difícil de digerir a nivel emocional y requiere ser planteada con empatía, sobre todo cuando la persona vive sola y/o tiene una dolencia cognitiva.
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Reconocer que alguien de nuestro entorno pierde sus facultades o aumenta su nivel de dependencia debido a la edad puede ser muy duro.
Sin embargo, cuando una persona mayor no puede valerse por sí misma y tareas básicas como hacer la compra, limpiar, cocinar, asearse o ir al banco se convierten en una misión imposible, llega el momento de buscar un cuidador.
Pero, ¿cuándo es necesario contratar a alguien para que se encargue de su cuidado?
Compartir y observar el comportamiento de nuestros mayores nos permitirá tener una mejor idea sobre la necesidad de este tipo de apoyo.
Algunas de las señales que pueden ayudarnos a tomar esta decisión son:
- Problemas de movilidad. Con los años, el deterioro físico se acentúa y se pierde autonomía. Si una persona mayor necesita ayuda para moverse por la vivienda, ir al baño o levantarse de la cama o el sofá, ha llegado el momento de prestarle ayuda.
- Problemas de memoria. Aunque es normal que con el tiempo aumenten los despistes, algunas pérdidas de memoria ponen en riesgo a la persona mayor. Este es uno de los principales motivos para convencer a un anciano de que necesita un cuidador.
- Enfermedades crónicas. Los mayores con enfermedades crónicas como Alzheimer, demencia, Parkinson o diabetes necesitan supervisión continua para controlar su medicación y cubrir sus necesidades. La figura del cuidador puede ser fundamental para ello.
- Bajo estado de ánimo. En la vejez, los episodios de depresión son más habituales de lo que creemos (aproximadamente el 14% de los adultos de 60 años o más viven con un trastorno mental, según datos de la OMS) debido a la soledad no deseada y a los problemas de salud. Si notas que un mayor que vive solo tiene un estado de ánimo bajo, puede ser el momento de sugerirle la contratación de un cuidador que pueda brindarle compañía y ayudarle a mantener su bienestar emocional.
- Descuido de la higiene. Cuando una persona mayor deja de prestar atención a su cuidado e higiene personal, es necesario, en primer lugar, prestarle apoyo y, en segundo, hacer un seguimiento para detectar posibles enfermedades como el Alzheimer o la demencia. En estos casos, tener un cuidador es la mejor manera de mejorar su calidad de vida.
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onvencer a un anciano de que necesita un cuidador es la solución a muchos problemas asociados a la dependencia en personas mayores que viven solas, entre ellos:
- Mala alimentación. Muchos ancianos que viven solos optan por alternativas nutricionales poco saludables que pueden desencadenar problemas de salud como obesidad, diabetes y trastornos cardiovasculares.
- Medicación inadecuada. La vida en solitario incrementa el riesgo de olvidos o la dejadez a la hora de solicitar ayuda médica o de tomar medicamentos, y una de las tareas de los cuidadores suele ser supervisar este aspecto.
- Falta de higiene. Ducharse o asearse puede ser muy complicado para algunos mayores por una cuestión de incapacidad o porque su vivienda no está adaptada. Esto hace que abandonen su higiene, con los problemas de salud que esto puede generar.
- Accidentes domésticos. Las dificultades de movilidad y coordinación, la pérdida de memoria y la merma de otras facultades son la principal causa de caídas, incendios, inundaciones y otros accidentes en domicilios de mayores que viven solos.
- Interacción social. La presencia de cuidadores mejora la interacción y el estado de ánimo de la persona a su cargo, y reduce la aceleración de síntomas asociados al envejecimiento como los problemas de comunicación y de memoria, o el deterioro neuronal.
Cómo convencer a un anciano de que necesita un cuidador
Muchas personas mayores prefieren mantener su independencia aunque eso suponga riesgos como las caídas o no recibir la atención y cuidados que necesitan.
En estos casos, convencer a un anciano de que necesita un cuidador implica hacerle comprender, tanto sus necesidades diarias, como los riesgos que implica vivir solo y los beneficios de contar con la ayuda de otra persona.
Algunas de las estrategias y argumentos que podemos utilizar son:
Reacción alérgica a productos de baño
A muchos mayores les preocupa perder su autonomía, convertirse en una carga, perder su independencia o ver expuesta su intimidad.
Afrontar estas cosas de manera clara es una forma de relativizar la situación y encontrar soluciones equilibradas.
Hablar de lo que le preocupa será un incentivo para explicarle cómo un cuidador le ayudará en su día a día, le facilitará muchas tareas y le permitirá seguir haciendo las cosas que le gustan.
Agua demasiado caliente o exceso de tiempo en la ducha
El agua caliente es relajante, pero, si está a una temperatura muy elevada o pasamos demasiado debajo de ella, eliminamos los aceites naturales de la piel, dejándola seca y propensa a la picazón.
Si eres cuidador de personas mayores, controla la temperatura del agua, tanto en duchas y baños, como en el aseo diario (por ejemplo, en el cambio de absorbente).
Exceso de fricción al asearse o secar la piel
Si una persona se muestra reacia ante la presencia de un cuidador, podemos sugerirle que acepte su ayuda para cosas puntuales o durante periodos cortos (por ejemplo, unas horas a la semana).
Conforme el anciano se sienta más cómodo, este tiempo puede aumentar hasta cubrir totalmente sus necesidades.
La paciencia y la comprensión son fundamentales para que las personas mayores se adapten a los cambios.
Por eso, debemos incidir en las ventajas de tener un cuidador.
Una buena idea es poner el ejemplo de personas cercanas que tengan un cuidador y que, gracias a ello, hayan mejorado su calidad de vida.
Esperamos que estos consejos sean útiles si estás valorando cómo convencer a un anciano que necesita un cuidador.
Puedes leer más consejos sobre el cuidado de personas mayores en nuestro blog.